Segundas partes nunca fueron buenas

—Raúl, ya queda menos para las elecciones, solamente dos meses. Poco tiempo, muy poco. Sesenta días quedan y aún no conocemos ningún programa electoral. Aún no sabemos si se va a hacer una nueva Ciudad del Transporte, un nuevo Centro Comercial, un cine, nuevas rotondas … Vete tú a saber.

Raúl contestó de forma pasiva—Amigo, sé sincero, que más te da. Los programas electorales ¿Para qué sirven? ¿Quién los lee? ¿Quién se lo cree a pies juntillas? Yo, ni de coña.

—Pues… llevas razón.

Raúl continúo la conversación como si impartiera cátedra—Amigo, no hay que fijarse en los programas electorales, lo importante son las ideologías. Si tú eres de izquierdas, tienes que votar al Pesoe, si eres comunista, a los comunistas, y si eres de centro derechas, al Pepé.

—Raúl no estoy de acuerdo contigo, en un pueblo eso no importa ¿hay diferencias ideológicas entre lo que ha hecho el Pesoe y lo que haría el Pepé? Nada de nada. Acaso, por poner un ejemplo, si ganasen los comunistas ¿Instalarían en Manzanares la III República y acabarían con la Monarquía?

—Ni de coña.

—Seamos serios, Raúl, déjate de demagogia y discursos vacuos, si votas al Pesoe es porque te gusta las personas que conforman la lista, el talante de su líder, y crees que las personas que integran ese equipo harán bien las cosas. Si votas al Pesoe es porque crees y estás convencido que durante 28 años se han hecho bien las cosas, y crees de forma tajante que los espectáculos de Sálvame Deluxe de los Plenos, es lo normal, lo que toca.

Raúl casi convencido contestó —Pues sí, viéndolo así, quizá lleves razón. Miraré la lista que más me guste.

—Si votas al Pesoe sabes que la feria será igual que todos los años, que celebraremos otras cuatro ediciones iguales de la Feria del Campo, que no habrá novedades, que todo será igual ¿Hay en ello algo de ideología socialista? No respondas, te lo digo yo, nada de nada. Si votas al Pepé, sabes que habrá cambios, para bien o para mal, se harán las cosas de otra manera. Votando al Pesoe sabes que, al menos, harán unas rotondas de cine, inauditas, increíbles… gastándose lo que no está escrito.

Raúl comenzó a agitar los brazos y a zarandear su gorra— ¡No jodas!, mira que cómo les dé otra vez por redecorar rotondas, ¡apaga y vámonos!

—Raúl si votas al Pepé, de antemano, sabes que no van a malgastar el dinero ¿hay en ello algo de ideología de centro derecha o socialista?

—Ninguna. No malgastar el dinero no es ni de derechas ni de izquierdas, es simplemente, de sentido común.

Continúe con actitud comprensiva—Mira Raúl, estoy convencido que los 20 integrantes de la lista del Pesoe son gente honesta, ilusionada y trabajadora, como los del Pepé. No lo pongo en duda.

— ¿Entonces?

—Lo que te planteo es si las nuevas caras del Pesoe ¿Realmente quieren un cambio o quieren continuar igual que estos 28 años? Raúl, tú, como yo, sabemos que continuarán igual…todavía no les he oído decir que van a cambiar. Esa es la cuestión que se debatirá en las próximas elecciones, continuar o cambiar. Si quieres continuar vota al Pesoe si quieres cambiar vota al Pepé.

Yo te animo a votar por un cambio en la clase política de Manzanares, por unos políticos que pacten, que alcancen acuerdos y que sean conciliadores. En las últimas elecciones municipales el Pesoe obtuvo 4.666 votos, frente al Pepé y los Comunistas que obtuvieron 4.020 y 814 votos respectivamente, todo ello se tradujo en 9, 7 y 1 concejales. ¿El Equipo de Gobierno ha tenido en cuenta esos 4.020 y 814 votos de la Oposición?

—Ni de coña, ya te lo digo yo, los ha ninguneado, basta ver un Pleno

— ¿Cuántas propuestas se han tenido en cuenta del Pepé? ¿Y de los Comunistas? Una o ninguna ¿Es justo? ¿Es democrático que no se tenga en cuenta ninguna de las propuestas de la oposición?

Raúl replicó súbitamente—Oye, si gana el Pepé, ¡a ver qué hacen!, ¿los tendrán en cuenta?

—Si gana el Pepé les pediremos que cumplan sus programas electorales y que tengan en cuenta las propuestas y proposiciones de la Oposición, atendiendo a los votos que representan. Basta cambiar el chip y la forma de pensar. Y eso, hoy día, el Pesoe de Manzanares, sabe en su fuero interno que no lo va hacer. Es difícil que cambie la forma de trabajar existente durante 28 años. Complicado. Ya sabes “segundas partes nunca fueron buenas”

Raúl, al oír esa frase dijo con tono de admiración—Amigo, así es, una vez intenté volver con una ex, hablamos y alcanzamos un acuerdo, nos dijimos, ¡¡¡tenemos que empezar de cero!!!! Así fue. Cambiamos todo. Nuevos amigos, nueva casa, nuevo coche, nuevas ilusiones, nuevos lugares de paseo…todo iba de cine, parecía una nueva relación.

— ¿Qué pasó?

— Fracasamos

— ¿Y eso?

—Me dijo que todo iba a ser distinto, que confiara en ella…pero me mintió…mi suegra todavía era la misma…o peor….

—Pues eso.